¿Cómo ha conectado este documental con tu yo adolescente?
Estos
alumnos han tenido la suerte de tener un apoyo, un foco centrado en ellos, que
les ha ayudado a abrirse y mostrar sus sentimientos, porque no todo consiste en
“lo dejo y ya”, detrás de esa frase hay una desmotivación enorme que muchos
profesores no saben ver o pasan desapercibidos. Todos valemos para algo y a
veces necesitamos que nos lo recuerden.
Este documental ha conectado con mi yo adolescente al sentirme identificada de algún modo con la sensación de no servir para nada y de no saber qué es lo que quiero. Para mí los años de instituto fueron los peores, mi familia es la única que me animó a seguir, ya que en todos los años de instituto pude comprobar que pocos profesores se preocupaban por ti. Y es que, están tan acostumbrados a tener alumnos problemáticos o que no hacen absolutamente nada en clase que para el sistema educativo es lo normal, dejarlos de lado y centrarse únicamente en dar su clase. A todos los alumnos que llevan esta “etiqueta” se les tacha de conflictivos, violentos, etc. Pero ¿Quién sabe lo que hay detrás de estas personas?, ¿Quién se ha molestado alguna vez en preguntarles que tal se sienten? Supongo que nadie, puesto que la mayoría de los compañeros que he tenido con este tipo de “etiquetas” han abandonado la ESO sin la oportunidad de realizar una FP o grado medio, directamente terminaron yéndose a trabajar.
Desde
pequeños es importante que nos enseñen a expresar nuestras emociones y aprender
a controlarlas, porque como hemos observado en el documental, no es hasta que
Emma les propone pensar en algo que les gustaba hacer de pequeños, cuando estos
alumnos expresan sus sentimientos y emociones. A veces retenemos tanto nuestros
sentimientos por miedo a que nos vean débiles. Esto es lo que le ha ocurrido a
estos alumnos, han construido durante muchos años una coraza que les impide
mostrar cómo se sienten y al recordar su pasado, a familiares o amigos con los
que pasaban el rato y que, tristemente, ya no están, han roto a llorar. Esto
demuestra la necesidad de tener a alguien ahí, apoyándote en tus logros o
motivándote a seguir, porque cuando esas personas faltan empiezas a estar
perdido.
También ha conectado con la importancia de no dejarte mal influenciar por otras personas, porque llegará un momento en el que la persona que pierda, seas tú. Debemos centrarnos en lo que nos gusta, sin que nos importe la opinión de los demás. Es importante tener autocritica y saber si de verdad obramos bien.
En definitiva, debemos dejar atrás los prejuicios, aprender que todos estamos aquí por algo y sobre todo dar esperanza a todas aquellas personas que lo necesitan, porque como estos alumnos hay muchos y la mayoría de ellos no son conscientes de la ayuda que necesitan. Como futuros docentes debemos prestar atención a cualquier necesidad que se preste, sea cual sea, comprender a nuestros alumnos y poder hacer de ellos personas llenas de motivación, esperanza y alegría.
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